martes, 15 de julio de 2014

MIRAR AL MIEDO DE FRENTE


Compleja aventura, sin duda enfrentar los miedos o fobias mas profundos;
aquellos que sin querer nos paralizan y se evidencia en nuestros actos y comportamientos
aquello  que  sin duda nos evoca de alguna forma un suceso nocivo y lesivo del pasado, sea de esta o de otra existencia; el  inconsciente profundo guarda celosamente los registro de los más mínimos suceso que acontecen en nuestra vida, hecho que permite que acudamos a estos registro cada vez que sea necesario, o simplemente  al ser estimulados mediante algún mecanismos, y active, eso que esta allí muy bien guardado...  sucesos que van y vienen, que salen a flote para recordarnos que algo del pasado no esta bien, sencillamente porque no se ha enfrentado, sanado y superado, muchos son los mecanismos de defensa que llevan al ser a guardar estos registros tal cual suceden, sin que sean procesados ni superados, es más  o menos como guardar un archivo x, sin ser revisado, pero que de alguna manera sabes que esta allí.

Esta es una experiencia que paraliza aún hasta el más fuerte, llegan los recuerdos, llegan los traumas, llegan los miedos más profundo que debilitan al ser y que  en un momento se sientes que te paraliza que te impide seguir,  no es una experiencia agradable, pero sin duda es la mejor manera de sanar... reconocer de frente lo que nos hace daño, reconocer mirándolo con  una perspectiva diferente, con el único propósito de sanar, eso que nos genera una carga de estrés profundo, de dolor, de confusión, que termina encerrando al ser  en esquemas  repetitivos,  por más doloroso que sea es posible sanar.

tener de frente la causa de tu miedo... es aterrador sin duda que si,  cuantos pensamientos, uno en especial de huir de todo, el sudor en le cuerpo, las palpitaciones aceleradas, la presión alterada, los ojos muy dilatados y  un intenso dolor de cabeza tal vez... lo miré, si, aún no se cuanto me costó hacerlo, ore muchos días antes medite mucho sobre como podría ser, el llanto me paralizo, entré en un estado de shock si, todo eso puede suceder, pero después de esa fuerte carga de cortisol, adrenalina y muchas mas reacciones químicas que se   generan al interior de  cuerpo, vuelve el sistema nervioso a tomar el control, para estabilizar todo el organismo, las  emociones son  algo semejante a estar navegando, en medio de la peor tormenta, donde paso a paso sientes que te hundes y que no hay otra opción más que tener Fe en que la tormenta pasará, pero una vez sucede haces parte de esa tormenta, de repente  algo sucede... cesa la tormenta y el cansancio vuelve al cuerpo, crees caer en un estado profundo de aletargamiento donde poco a poco se vuelve a mirar de frente la realidad.

Y pasan unos cuantos minutos y te das cuenta que  a pesar del profundo impacto sientes un poco de calma...has sobrevivido a un momento de terror... para sanar el miedo para abandonar todo aquello que del ayer te impedía vivir en paz y con plena libertad.

LO MIRE DE FRENTE Y SE DESVANECIO... simplemente perdió ese poder negativo para mí.

Escrito ( Ana Escobar)





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