NADA VUELVE A SER IGUAL... PERO PUEDE SER MEJOR

El ser humano  se debate en un estado profundo de inconformidad alucinante 

que lo lleva a crear trastornos depresivos,  dependencias
y otros   factores que resultan un tanto complejos de manejar.

Parte de estos estados  de frustración obedecen a los apegos

 que se poseen  sobre algo o alguien, sobre el objeto o la persona que satisface

mis deseos mas profundo o arraigados, lo cual complica un poco el pasaje

 que nos recrea la vida,donde estamos obligados si o si a cambiar, 

esto es algo inevitable, ley natural de la vida la transformación y la evolución.

El ser humano se limita en vivir  deprisa
sin enfrentar la realidad ni actuar con  consciencia,
lo que lo lleva a tomar decisiones a veces un tanto equivocadas 

que acarrean para sí una serie de situaciones que desequilibran

 la estructura de pasividad aparente y paz que se tenía.

En el largo camino de aprendizaje enfrentará en algún momento

 sus miedos más profundos, enfrentará y asumirá perdidas importantes,

 cambiara, sus esquemas de vida y se dará cuenta que a pesar de todo lo malo

 o  absurdo por lo que haya pasado,

 todo ha sido solo un estado transitorio, que forjo su vida en algo mejor.

Nada volverá a ser igual, nuestros sueños de niños, 

nuestros amores idealizados y las cosas mas simples que alguna vez hicieron parte de ti, 

habrán cambiado, pero con seguridad tendrás el poder y al autonomía 

de decidir que quieres ser y  a donde quieres llegar; 

si miras atrás sin dudarlo siempre pensaras en algo mejor,

 algo de tu vida querrás cambiar, aunque no pidas borrar lo vivido, 

porque solo a ti te pertenece, mirarás con tranquilidad  enfrentando el dolor, 

la duda, los apegos  y  el miedo y simplemente serás mejor, 

porque habrás despertado de un sueño utópico que te  impedía 

ver la realidad, que endulza la vida, aún después de los momentos más amargos.

Por lo tanto nada volverá  a ser igual, pero con seguridad que podrá ser mejor.

( Escrito : Ana Escobar)