martes, 19 de febrero de 2013

TECNOLOGIA




Perdidos en el tiempo.. o perdidos en la tecnología...

De que forma este fenómeno mundial ha afectado nuestra sociedad que esta encerrada en un circulo vicioso que va y viene? ; suele pasar más a menudo en aquellos estados psicológicos un poco inmaduros, los jóvenes de hoy están descontrolados porque la sociedad consumista  ejerce un gran poder sobre ellos, en especial los medios tecnológicos, lo que  lleva a tomar decisiones apresuradas sobre lo que realmente se quiere, el estar a la moda  con la última tecnología, les proporciona un estatus  que les brinda una seguridad aparente.

Las nuevas manías y apegos están allí, hecho lamentable que lleva a la construcción  de   una sociedad mas fría e indiferente, se han perdido los valores y la comunicación; suena irónico esta es la era de la comunicación sin una sociedad que se comunique, las palabras sobran, el contacto se reemplaza por una vídeo llamada, y poco a poco se ha contribuido a que las relaciones sociales como deberían ser se acaben;  es frecuente, encontrar en una mesa  algunos amigos que  comparten el juego de la tecnología, donde  el respeto se pierde, se chatea, y se abusa sin tener el más mínimo respeto por la persona que nos acompaña.

A pesar que la tecnología acerca a las sociedades y es maravilloso poder hacerlo de un extremo del planeta a otro sin que  esto cause  ninguna dificultad, es cierto también que en nombre de la tecnoligía se han construido grandes muros de indiferencia, aún en nuestros propios hogares.

Hace poco hablaba con una persona mayor, y me decía con nostalgia, que recordaba cuando  había un televisor por casa y el espacio de reunión familiar tenía que ver con esto, ahora hay tantos televisores y tantos computadores como personas habiten  en una casa.

A cuantos pasos esta tu ser mas amado, tu madre, tu padre, tu hijo etc,  no dejes que entre  tu y ellos se construya un muro tan grande que pase el tiempo y ya no sepas de que hablar.
Construye muros de amor y no de indiferencia.

( Escrito: Ana Escobar)





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