jueves, 9 de agosto de 2012

CURAR CON LA MENTE


El pensamiento, aquel que ha causado tanta controversia entre científicos, fisiólogos, neurólogos, psiquiatras y psicólogos, hecho que ha servido para poder analizar todos los tópicos referentes al mismo, aún, un poco confuso para algunos y mucho mas certero para otros.

El pensamiento no recide en si en el cerebro, este no es una parte  física o  masa encefálica, esta es solo el vehículo por el cual el pensamiento fluye y se manifiesta. El pensamiento es un atributo del espíritu, que es el principio inteligente del ser, en el libro Autodescubrimiento de Divaldo Pereira Franco ( Juana de Angelis) afirma " el pensamiento  es la manifestación de la mente, que no depende de la materia y a su vez, es originada en el espíritu.
El espíritu posee la facultad mental que expresa el pensamiento en todas las direcciones, utilizando el cerebro humano para comunicar sus ideas con las demás personas" y continua diciendo "... el pensamiento, la mente plasma en el cerebro la idea, a través de las diferentes reencarnaciones, evolucionando el ser espiritual... Disciplinar y edificar el pensamiento a través de la fijación de la mente en ideas superiores de la vida, del  amor, del arte elevado, del bien, de la inmortalidad, constituye el objeto moral de la reencarnación, de modo que la plenitud la felicidad, sea la conquista a ser lograda"( pag 28-30) 

Mucho se ha dicho sobre el poder del pensamiento,  el hecho es que allí esta el gran potencial humano a través del pensamiento se forman ideoplastias que permiten de cierta forma materializar la energía y convertirla en algo real, recordar un poco que le pensamiento no diefrentecia entre lo positivo y lo negativo, simplemente es el  ejecutor de nuestros deseos mas hermosos, pero también más hostiles, hecho que nos lleva a reflexionar sobre la forma como elaboramos el pensamiento, aunque esto es un poco mas complicado,   teniendo en cuenta el gran filosofo René Descartes con su frase emblemática "Pienso Luego Existo" donde nos llama e invita a actuar con prudencia, y a entrenar la mente en los buenos hábitos y pensamientos saludables.

Cada el que el ser se empecina en pensamientos negativos que contengan actos de envidia, rencor, odia, melancolía, tristeza profunda, en fin todo aquello que lleva al individuo a un desequilibrio emocional, a la vez esta contribuyendo a enfermar su cuerpo físico, por la irradiación de la energía, es como si nos tomáramos un veneno que va haciendo efecto lentamente en los diferentes órganos del cuerpo físico.

El solo hecho de pensar con Fe, optimismo y alegría en todos los momentos de la vida, proporciona una especie de inmunidad  para nuestro salud física y mental, vivir siempre en la comunión del bien, desafiar la vida con lo que para muchos en apariencia es imposible, transformar nuestro ser con el único propósito de alcanzar la plenitud y la felicidad, para esto hay que empezar por aplicar otro de los grandes aforismos griegos  " conócete a ti Mismo" Empezar a explorar cada pensamiento, hacer un análisis del día para sacar un balance de todas las cosas que podamos empezar a corregir tendencias equivocadas, la entrega constante a la meditación y la oración también proporcionan al ser una paz y  equilibrio verdadero.

La vida se simplifica cuando decidimos cambiar y aceptar, soltar todo aquello que no podemos poseer,  en superar el pasado y vivir cada instante con profunda paz y alegría.

Apelando a un libro que es simple y sencillo para los amantes de la lectura edificante, " Pensar Bien Sentirse Bien" de Walter Riso,  allí se plantean muchos postulados  que sirven de ruta para cualquier persona que quiera emprender un viaje verdadero en la transformación de su pensamiento.

por último, nada nos puede llevar  a la felicidad si no estamos en paz con nosotros mismos y con los demás, lo que implica aplicar la terapia sanadora del amor y del perdón que nos lleve a  ese encuentro  con nuestro verdadero YO PODEROSO, ese que nos invita a encontrarlo en lo profundo del ser para renacer como un ser renovado y verdadero.

( Escrito Ana Escobar)




No hay comentarios:

Publicar un comentario